Autódromo de Monza

Después de Brooklands y Indianapolis, el autódromo de Monza fue el tercer autódromo de la historia, conocido por cada parte del mundo y muy apreciados por los amantes de las carreras. Además, se trata del circuito más rápido del mundo.

Sin embargo, en Monza no corren solamente los pilotos de profesión: si eres bastante atrevido, ¡aquí puedes conducir un Ferrari o bien un Lamborghini! De hecho, en el autódromo es posible disfrutar con distintas experiencias de conducción, con el propio coche o bien con un coche Gran Turismo, de Formula 3 y Formula 1. ¡Ven a visitar el autódromo, un Ferrari te está esperando!

Aquí hay unos datos sobre el Autódromo: las obras empezaron el 15 de mayo y terminaron después de solamente 110 días, gracias a 3.500 obreros, 200 carros, 30 camiones y un ferrocarril Decauville de 5 km con 2 locomotoras y 80 vagones.

En su primera versión, el circuito tendría que tener dos pistas: un circuito y un anillo para la alta velocidad, con dos curvas peraltadas. Durante los años sufrió muchos cambios, debidos a los accidentes (incluso mortales) que se produjeron: hoy mide 5.793 metros.