Castillo de Malpaga

El Castillo de Malpaga fue construido gracias a un gibelino seguramente antes del descubrimiento de la pólvora.

Gracias a su profundo foso, el Castillo permaneció sin conquistar durante mucho tiempo y volvió a vivir solamente en el año 1456, cuando el renombrado Capitán General de la República de Venecia Bartolomeo Colleoni decidió comprar el Burgo de Malpaga por 100 ducados de oro, para convertirlo en su vivienda privada y en el centro de su dominio.

El Castillo se transformó en la sede del Condotiero y fue testigo de muchos acontecimientos históricos, acogiendo personajes célebres como Borso d’Este, los hijos de Francesco Sforza, Carlo II Duque de Borgoña y Cristiano I rey de Dinamarca, los cuales llegaban aquí para homenajear el Capitán.

El Castillo de Malpaga es uno de los edificios lombardos más significativos del 1300. Domina un territorio de 330 hectáreas de campos cultivados dentro del Parque del Río Serio, formando un conjunto natural y arquitectónico de gran valor, protagonista del proyecto de recalificación territorial PER MALPAGA.

Cada fin de semana, desde marzo hasta noviembre, el Castillo de Malpaga abre sus puertas para enseñar al público sus maravillas. Durante estos tour de verano es posible admirar los hermosos frescos que decoran las antiguas Salas, realizados por famosos artistas activos entre el Siglo XV y el Siglo XVII, y disfrutar con el encanto del pasado explorando las habitaciones decorada con reproducciones de muebles antiguos.

A solicitud es también posible visitar todo el Burgo de Malpaga con una agradable paseo en carruaje, para descubrir sus lugares más escondidos. Muchos eventos, iniciativas y recreaciones históricas, como el tradicional Palio de Malpaga, animan el Burgo y le dan vida al Castillo a lo largo del año.