La historia de esta sala de conciertos está ligada a la de un hombre, Giuseppe Greppi, cuyo nombre lleva.
La sala alberga el Teatro dell’Immacolata desde principios del siglo XX y en 1981, por iniciativa de un activo comité local, fue renovada y rebautizada como Sala Greppi.
Es un homenaje a Giuseppe Greppi, un hombre que vivió en la segunda mitad del siglo XIX, que vinculó su vida al Oratorio de la Inmaculada Concepción, dedicándose por completo a los niños, los pobres y los enfermos; estaba tan entregado a esta causa que destinó todo el producto de sus actividades empresariales a buenas obras, incluida la construcción de la nueva y para la época muy moderna sede del Oratorio de la Inmaculada Concepción en 1903.
Actualmente, la Sala Greppi acoge numerosos conciertos a lo largo del año.