Un convento construido por el gran condottiero bergamasco del siglo XV Bartolomeo Colleoni alberga ahora un museo dedicado a la cultura subsahariana.
Los frailes dominicos dieron paso en 1920 a los Pasionistas, que crearon el museo en 1984 y donan los beneficios a sus misiones en Kenia y Tanzania.
Se trata de un museo interactivo: no sólo puedes observar, sino también manipular, participar en talleres y animaciones, siguiendo la guía multimedia en tu tableta o smartphone.
¡Te convertirás en un auténtico africano y experimentarás cómo es vivir en una aldea!