Cuarenta años después, Giovanni Monaci ha renovado la apuesta que hizo en el pasado y, con la ayuda de sus hijos, se ha trasladado a Almenno San Salvatore para relanzar un valle, el nacido en torno al río Imagna, con un enorme potencial.
La nueva estructura, tecnológicamente a la vanguardia del sector, se prestó a ampliar la gama de productos que ahora llevan el nombre del Valle Imagna. Desde noviembre de 2015, con la adquisición del Caseificio Battipaglia di Brugherio (MB), la familia Monaci también ha empezado a poner sobre la mesa quesos de pasta hilada, una especialidad del sur de Italia. Activa desde 1957, la histórica quesería basa su filosofía empresarial en el uso de técnicas tradicionales de transformación de la leche, especializándose en particular en la producción de mozzarella de leche de vaca, según la receta típica a base de leche entera, cuajo y sal.