EL RESTAURANTE
En una espléndida villa del siglo XVIII, propiedad de la familia Blondel, coexisten estructuras antiguas y muebles modernos, creando un ambiente muy agradable, refinado y acogedor.
El restaurante cuenta con cuatro acogedoras salas, cada una animada por una chimenea antigua, y un jardín señorial, discreto y sombreado para almuerzos y cenas al aire libre.
La torre del siglo XIII, que se eleva con su austera elegancia, alberga una bodega bien surtida, gestionada por el propietario Camillo Frosio, cuya gran pasión por los vinos invita a los clientes a visitarla.
En 2020, el establecimiento celebró 30 años de actividad.
EL CHEF
Paolo Frosio
El personal del restaurante está coordinado por Paolo y Camillo, uno a cargo de la cocina y el otro de la sala, acompañados por sus esposas.
Paolo y Camillo Frosio, niños prodigio de la restauración en Bérgamo, obtuvieron su estrella Michelin en 1993.
Ofrecen platos de sabor clásico-moderno, preparados con mucho cuidado y a menudo elaborados con productos tradicionalmente “importantes” como cigalas, bogavante, foie gras, pichón, caviar y trufa.
Buscan principalmente utilizar productos de los presidios Slow Food y, recientemente, productos kilómetro cero (locales).